Se acerca la primavera y las alergias con ella. Para muchas personas la belleza de la primavera se ve empañada por la molesta alergia causada por el polen de árboles, flores, pasto y malezas. En este articulo te daremos algunos consejos prácticos en caso de que seas de aquellas personas que se ven afectadas durante la primavera, pero primero veamos ¿qué es una alergia?
Una alergia es una respuesta exagerada del sistema inmunológico hacia un agente externo. Cuando este agente entra en el organismo se liberan unos químicos llamados “histaminas” las cuales tiene la misión de atacar el alergeno y al liberarse estas histaminas se producen esos molestos síntomas. Aunque el polen es inofensivo el organismo lo reconoce como un enemigo y al atacarlo se producen esos indeseados síntomas como: congestión y secreción nasal, estornudos, ojos llorosos, picazón, tos, irritación en la garganta, e incluso en casos más graves puede provocar asma.
Los medicamentos más utilizados para tratar la alergia son los descongestionantes y los antihistamínicos, pero debes tener cuidado ya que algunos de ellos pueden tener efectos secundarios como somnolencia, cansancio, visión borrosa, mareos, resequedad en la boca, etc. Además, pueden interferir con otros medicamentos, por eso no te automediques, si tu alergia es más grave recomendamos consultar con un especialista.
¿Cómo disminuir los síntomas?
La recomendación principal para tratar una alergia es la de evitar el alergeno, pero con el polen no es tan fácil ya que está por todos lados corriendo por el aire y no podemos estar encerrados en casa todo el día, pero de todas formas hay algunas cosas que podemos hacer, por ejemplo, al salir podemos utilizar un cubre bocas el cual nos ayudará a disminuir la exposición al polen. Cuando ventiles tu casa no lo hagas durante el amanecer o el atardecer, ya que en esas horas el polen es más fuerte en el ambiente. Si abres las ventanas debes hacerlo entre las 11:00 y las 16:00, pero antes o después de esas horas es mejor cerrar todo.
Otro consejo y el más importante es el de fortalecer tu sistema inmune, para esto debes cuidar tu alimentación y evitar o disminuir alimentos que te puedan causar alergia o sensibilidad. No todas las personas tienen las mismas sensibilidades alimentarias, pero algunas de las más comunes son: cafeína, gluten, maní, lactosa, azúcar, endulzantes artificiales, soya, alcohol, entre otros. El asunto es liberarle la carga al sistema inmune para así tener una mejor respuesta frente a una alergia.
También te aconsejamos que incluyas en tu dieta algunos de estos alimentos:
Probióticos: para fortalecer el sistema inmune debemos empezar por la flora intestinal y los probióticos son lo mejor para cumplir con esta tarea, ya que repueblan el intestino y al hacer esto el sistema inmune se fortalece.
Miel cruda: la miel cruda contiene naturalmente polen, lo cual ayudará a que el organismo se acostumbre, consume unas cucharaditas al día, pero recuerda que la miel debe ser cruda (sin filtrar).
Té verde: el té verde contiene antihistamínicos naturales que te ayudarán a reducir los síntomas.
Vinagre de sidra de manzana: promueve el drenaje linfático y fortalece el sistema inmune. Para obtener sus beneficios el vinagre debe ser crudo, por lo general en el envase dice “con la madre” lo cual quiere decir que es sin filtrar.
Cebolla: contiene quercetina, un químico natural que reduce la reacción natural del cuerpo a las histaminas.
Otros alimentos que te pueden ayudar son el jengibre y los cítricos ya que ayudan a eliminar toxinas del organismo y de esta forma también fortalecemos el sistema inmune.
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